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Cómo abrir un café literario – sabor y cultura
El café y la Literatura tienen su punto de fusión en que ambos son arte. Así como la combinación de palabras debe ser la justa para lograr el cometido de conmover, la temperatura del café no debe exceder los 92 ºC para no quemarlo… los dos componentes requieren de técnicas para ser disfrutados, entonces, ¿por qué no disfrutar de ambos en un mismo lugar? Aprende cómo abrir un café literario y pon a Shakespeare a tomar un café con tus clientes.
Razones para abrir un café literario
Es muy común que los amigos se reúnan a tomar un café para conversar, estudiar o compartir un momento juntos. Lo mismo ocurre con las parejas, madres e hijos (con hijas especialmente) y también con las personas solas.
¿Qué hay mejor que un café con tarta de manzana? La respuesta es sencilla, un café con tarta de manzana y el último best seller para leer, o aquel clásico que siempre oíste nombrar y nunca llegaste a leer.
Abrir un café literario tiene el éxito garantizado si es que sigues los consejos para hacerlo despegar.
Dónde abrir un café literario
La zona para abrir un café literario debe ser céntrica, pero en lo posible, en calles transversales, así el bullicio no interfiere en el ambiente de concentración que aspiras crear.
Cómo equipar un café literario
A la hora de abrir un café literario, es importante que pienses detalladamente en su equipamiento. Lo primero que necesitarás son amplias pero no muy altas estanterías, recuerda que no es una librería, sino un lugar en el que los clientes tienen que poder tener acceso a todos los libros en todo momento, sin necesidad de tener que solicitar asistencia.
El mobiliario conviene que combine un sector con las clásicas mesas y sillas de madera, con algunos siempre muy bienvenidos esquineros y, además, un sector con cómodos sofás muy mullidos y mesas enfrente suyo y a sus costados, que generen un rincón de lectura y café.
Selección de libros para un café literario
Quien va a leer a un café, lo hace por puro placer. De modo que los libros serán Best Sellers de fácil lectura, totalmente digeribles. Una muy buena idea es incluir tanto clásicos como actuales. A pesa de que su lectura no es precisamente fácil, un clásico que no puede faltarte es Shakespeare, sobre todo por la influencia que tiene en nuestro hablar cotidiano (¿sabías que muchos de nuestros dichos son sacados de este maestro de la Literatura Universal?); no dejes de incluirlo. Luego agrega Stephen King, Agatha Christie, Sydney Sheldon, Paulo Cohelo… la lista sigue, es interminable.
Contáctate con editoriales para que te hagan un descuento, o tal vez puedas negocias que te den los libros gratis, ya que con el argumento de que no los venderás, a ellos les servirá publicitar sus libros y que la gente quede con deseos de comprarlos luego. Pídeles un ejemplar de un inventario que previamente armarás.
Qué servir en un café literario
Por supuesto que un aspecto vital al abrir un café literario es pensar en el menú. No podrá faltar la gama entera de café: café negro, cortado, expreso, irlandés, con grapa, con crema, con especias, con chocolate… además de la oferta gastronómica, que deberá incluir bocadillos, tales como panecillos saborizados, sándwiches, pan de nuez, entre otros, más tartas y tortas dulces.
Así es cómo abrir un café literario.